domingo, 15 de marzo de 2009

El arte del copieteo

¡Hola de nuevo! Tras este breve paréntesis de exámenes, agobios y nervios volvemos a la normalidad, así que disculpad este silencio ajeno a mi voluntad y debido a la 2.ª evaluación, la cual hemos dejado atrás. ¡Ya está! ¡Veis como no era para tanto! Damos la bienvenida a la primavera, a la par que a la 3.ª evaluación. ¡Qué pronto pasa el tiempo! ¡Seis meses ya han transcurrido!
Al hilo de lo anterior querría hablar de las archiconocidas chuletas que el Diccionario de la RAE define como "Entre estudiantes, papel pequeño con fórmulas u otros apuntes que se lleva oculto para usarlo disimuladamente en los exámenes". ¿Es lícita su utilización? O por contra, ¿suponen un auténtico fraude y convierten a quienes las utilizan en auténticos tramposos que infringen las más básicas normas? En honor a la verdad, durante mi vida como docente he visto las más variopintas y dispares clases de chuletas, desde los tradicionales papelitos hasta las más elaboradas como el caso de aquella alumna de Ibiza de 2.º C, a quien pillé in fraganti copiando al dictado de un MP3. Ciertamente resultó muy divertido mientras la veía doblar demasiado el cuello y ella ocultaba el auricular con su cabello.
No pretendo hacer abogado del diablo y que nadie se rasgue las vestiduras, durante mi época como estudiante copié poco, la verdad sea dicha, si acaso alguna palabra o fecha en la palma de la mano que luego con el sudor, causado por los nervios a ser cogido, se emborronaba y de poco servía.
No obstante, abogo por las chuletas y siempre digo que los estudiantes están en todo su derecho, es más, les animo a que lo hagan, pues así leen, resumen y sintetizan, por lo tanto, ¡benditas chuletas! ¡Y más en los tiempos que corren! Incluso muchos después ya no han de recurrir a las mismas porque se les ha quedado tras el proceso de copista amanuense. Así pues, ¡hacedlas y utilizadlas siempre y cuando no os pille!
De igual modo, no todas las materias se prestan al sublime arte de la imitación, por lo que no siempre se puede echar manos de ellas. Me gustaría que visionarais la siguiente secuencia de la inigualable y divertidísima serie Aída, donde Fidel recurre a las chuletas.


Por otro lado, dar las gracias a Ana Soriano porque, siempre atenta a los gazapos, inmortalizó con su móvil la importancia de la ortografía, en este caso de la b / v, donde en un cartel de nuestra querida Villena alguien dio un traspié ortográfico, pero que tiempo después alguien -no sabemos si el/la mismo/a susodicho/a- corrigió con un rotulador.

Me gustaría que observarais la fotografía de la motocicleta realizada por Héctor, ¡es una pasada!, pues perdonad mi ignorancia en cuestiones técnicas relativas a la fotografía, pero un objeto en movimiento para capturarlo hay que manejar el obturador con gran maestría y, sin lugar a dudas, vuestro compañero lo hacer realmente bien. Desde luego que con su gracejo y donaire nos regala algunos momentos irrrepetibles con sus chistes -el de la magia fue muy bueno-, aligerando en ocasiones las clases.
Bueno, para ir finalizando diré que nuestro mes estrella será, sin que os quepa la menor duda, el de mayo, con lo de la ruta literaria y el estreno de nuestros teatros. Os dejo en la columna de la derecha, aunque ya lo tenéis en soporte papel, el documento con los días preparatorios de la ruta, así como los días y horas de los ensayos. Agradeceros públicamente que hagáis este soberano esfuerzo al tener que venir por las tardes, pero sabed que después recogeremos la recompensa a todos estos sacrificios.
La relación de los/as 24 alumnos y alumnas -ocho por grupo-, que participarán en la ruta literaria "Antonio Machado y Soria", es la que a continuación os detallo fotografía del grupo incluida). ¡Gracias Juan Carlos por apretar el gatillo y hacer de improvisado fotógrafo! También indicar que la profesora acompañante será Graciela, quien imparte la materia de Inglés. ¡Enhorabuena a los/as seleccionados y aprovechad esta oportunidad única! El resto sabed que también me hubiera gustado contar con vosotros/as, pero lamentablemente sólo se podía elegir a 24. Aunque ya lo sabéis, os recuerdo que más de 2 ausencias comportan la baja automática de la ruta, por lo que su plaza pasa al siguiente alumno en reserva.
Muy bien por vuestra participación en el blog de Antonio Machado, a los que todavía no habéis aportado todavía vuestro comentario os animo a que lo hagáis y, al resto, seguid participando, más cuando los/as compañeros/as de Córdoba van a empezar a hacerlo en breve.

ALUMNOS/AS PARTICIPANTES EN LA RUTA LITERARIA

Castelló López, Tania (3.º ESO C)
Escoda Aroca, Aday (3.º ESO C)
Ferriz González, José (3.º ESO B)
Hernández Micó, Paloma (3.º ESO C)
Herrera Pisco, Alejandra (3.º ESO A)
Linares Mora, Vicente (3.º ESO A)
Navarro Briones, Rubén (3.º ESO B)
Navarro García, Aitor (3.º ESO A)
Pardo Calatayud, Andrea (3.º ESO B)
Parra Camarasa, Ana (3.º ESO C)
Pascual Hernández, Sergio (3.º ESO A)
Payá Carpena, Cristina (3.º ESO B)
Sáez Esteban, Elia (3.º ESO A)
Soriano Micó, Ana (3.º ESO C)
Soriano Navarro, Sheila (3.º ESO B)
Tomás Mataix, David (3.º ESO C)
Torró Conca, Cristina (3.º ESO B)
Valiente García, Montana (3.º ESO C)
Vidal Vañó, Carmen (3.º ESO A)
Vidal Vañó, Jorge (3.º ESO A)
Vidal Vañó, María (3.º ESO A)
Vilanova Navalón, Estefanía (3.º ESO B)
Villena Martínez, Judith (3.º ESO C)
Zapater Martínez, Senén (3.º ESO B)
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lunes, 2 de marzo de 2009

El Caballero de la Triste Figura

Sepan vuesas mercedes que nuestra dama de nombre Inés ya trajo al mundo a Martina, por lo que desde aquí vaya nuestra más sincera enhorabuena y felicitación.
A lo largo de esta semana hemos estado viendo El Quijote, una obra que nace como una crítica basada en el sentido del humor a los libros de caballerías, por entonces muy leídos y cuyos argumentos habían llegado al máximo disparate.
Asimismo, la primera parte se publicó en 1605, con el título completo de El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, y en 1615, la segunda, El ingenioso caballero don Quijote de la Mancha. Tuvo gran éxito y se hizo extraordinariamente popular.
Nuestro autor, Cervantes, siempre quiso ser poeta y consideraba la poesía la gracia que no quiso darle el cielo; de hecho, hay un momento en el que la sobrina de don Quijote teme que a su tío le pueda dar por la poesía: “[...] y lo que sería peor, hacerse poeta, que según dicen es enfermedad incurable y pegadiza”.
Don Quijote representa al idealista, que se empeña en defender el bien y castigar el mal, pero que casi siempre se encuentra con el fracaso y la humillación. Es un hombre generoso, tolerante e instruido, conocido entre sus vecinos con el apodo de “el Bueno”. Va evolucionando y, mientras al principio transforma la realidad para adaptarla a su fantasía, en la segunda parte de la novela se produce una “sanchificación”, es decir, distingue la realidad de la ficción y ve las cosas como son, pero que los demás le cambian la realidad para burlarse de él. Un loco en aparencia, pues realmente no lo estaba tanto y tras cuya demencia encontramos el mundo como debería ser.





"Hechas, pues, estas prevenciones, no quiso aguardar más tiempo a poner en efecto su pensamiento, apartándole a ello la falta que él pensaba que hacía en el mundo su tardanza, según eran los agravios que pensaba deshacer, tuertos que enderezar, sinrazones que enmendar y abusos que mejorar y deudas que satisfacer". (Capítulo II)

Sancho Panza representa al realista que vive apegado al mundo de lo material y lo cotidiano. Es un hombre sencillo, rústico y pacífico que tiene gran sentido común:



“En este tiempo solicitó don Quijote a un labrador vecino suyo, hombre de bien -si es que este título se puede dar al que es pobre-, pero de muy poca sal en la mollera".
Sin embargo, conforme va transcurriendo la novela se va contagiando del carácter idealista de su amo (“quijotización”).
A partir de la aventura de los molinos, el grupo Mago de Oz compone la canción La leyenda de La Mancha, interpretando el espíritu quijotesco, que podéis escuchar.



La complejidad narrativa de El Quijote es sorprendente, así, tenemos a un escritor (Cervantes) que inventa a un personaje (Alonso Quijano), que a su vez inventa a otro personaje (don Quijote) y a otro autor (Cide Hamete Benengeli), cuya obra sirve como fuente a una traducción: la novela de Cervantes. Además, en la segunda parte, los personajes de la novela conviven con personas reales que les conocen porque han leído la primera parte del libro.

Uno de los muchos pasajes llenos de humanidad y nobleza en los que don Quijote rezuma bondad y nobleza de corazón sería el de su paso por la venta -castillo encantado según él- de Juan Palomeque, donde aparece Maritornes, la moza asturiana. Su escasa belleza física ("tuerta de un ojo, del otro no sana, bajita, cargada de espaldas") y lo poco que la valora su amo y, probablemente, la mayoría de los que pasan por la venta ("¿Adónde estás, puta? A buen seguro que son tus cosas estas") contrastan con la bondad que muestra al socorrer a Sancho Panza tras sufrir el famoso manteo. La fea, la contrahecha, la prostituta posee un alma generosa, que no sólo no guarda rencor a aquellos huéspedes locos por cuya culpa no pudo retozar con su mancebo, sino que hasta pone dinero de su bolsillo para que Sancho halle sosiego con un trago de vino.
Cervantes transmite su visión del mundo y del ser humano a través del contraste entre un personaje que se empeña en luchar por 1) una desfasada fantasía caballeresca y 2) la sociedad real de su tiempo, en la que conviven venteros, labriegos, bandidos, curas o aristócratas. Con ello se nos muestra el tema del choque entre 1) el idealismo y la realidad, 2) entre la locura y la cordura, 3) entre las ilusiones y el desengaño, donde las apariencias engañan y todo es relativo.

"La libertad, querido Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron los cielos".

El siguiente vídeo es la conmovedora muerte de don Quijote, en el que se condensan algunos de los temas fundamentales de la obra: el desengaño, el idealismo, la oposición locura / cordura, la amistad o la mutua influencia entre don Quijote y su escudero. Observamos cómo Sancho le pide a don Quijote que no se deje morir, que trate de recuperar las ganas de vivir y haga un esfuerzo por no abandonarse. Asimismo, se alude al episodio en el que el Caballero de la Blanca Luna -su vecino Sansón Carrasco- ha vencido en la playa de Barcelona a nuestro hidalgo, lo que le obliga a regresar a su aldea.




-¡Ay! -respondió Sancho llorando-. No se muera vuestra merced, señor mío, sino tome mi consejo y viva muchos años, porque la mayor locura que puede hacer un hombre en esta vida es dejarse morir sin más ni más, sin que nadie le mate ni otras manos le acaben que las de la melancolía. Mire no sea perezoso, sino levántese de esa cama y vámonos al campo vestidos de pastores, como tenemos concertado: quizá tras de alguna mata hallaremos a la señora doña Dulcinea desencantada, que no haya más que ver. Si es que se muere de pesar de verse vencido, écheme a mí la culpa, diciendo que por haber yo cinchado mal a Rocinante le derribaron; cuanto más que vuestra merced habrá visto en sus libros de caballerías ser cosa ordinaria derribarse unos caballeros a otros y el que es vencido hoy ser vencedor mañana. [...]
-Señores -dijo don Quijote-, vámonos poco a poco, pues ya en los nidos de antaño no hay pájaros hogaño. Yo fui loco y ya soy cuerdo: fui don Quijote de la Mancha y soy ahora, como he dicho, Alonso Quijano el Bueno. Pueda con vuestras mercedes mi arrepentimiento y mi verdad volverme a la estimación que de mí se tenía. [...]

En fin, llegó el último (instante) de don Quijote, después de recibidos todos los sacramentos y después de haber abominado con muchas y eficaces razones de los libros de caballerías. Hallose el escribano presente y dijo que nunca había leído en ningún libro de caballerías que algún caballero andante hubiese muerto en su lecho tan sosegadamente y tan cristiano como don Quijote; el cual, entre compasiones y lágrimas de los que allí se hallaron, dio su espíritu, quiero decir que se murió.



Antes de finalizar me gustaría transcribir los versos de León Felipe, en los que recoge el desánimo y la tristeza de nuestro hidalgo por no conseguir su utopía (sueños e ideales).

VENCIDOS
Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar.
Y ahora ociosa y abollada va en el rucio la armadura,
y va ocioso el caballero sin peto y sin espaldar,
va cargado de amargura,
que allá encontró sepultura
su amoroso batallar.
Va cargado de amargura,
que allá “quedo su ventura”
en la playa de Barcino, frente al mar.

Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar.
Va cargado de amargura,
va, vencido, el caballero de retorno a su lugar.
¡Cuántas veces, Don Quijote, por esa misma llanura
en horas de desaliento así te miro pasar!
¡Y cuántas te grito: Hazme un sitio en tu montura
y llévame a tu lugar;
hazme un sitio en tu montura,
caballero derrotado,
hazme un sitio en tu montura,
que yo también voy cargado
de amargura
y no puedo batallar!


Ponme a la grupa contigo,
caballero del honor,
ponme a la grupa contigo
y llévame a ser contigo
pastor.
Por la manchega llanura
se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar...

No olvidéis los gentilicios ni los refranes y dichos de El Qujote para el examen. La vida de Miguel de Cervantes NO debéis estudiarla.

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